Por: Tania Pacheco / Especial para De Viaje
Tania Pacheco vive en la capital de Corea del Sur hace un año, y cuenta sus vivencias a través de un blog.
Vivo en Seúl, hace un año. Contrario a la imagen que este país pueda proyectar al mundo por su cercanía y relación hostil que existe entre Corea del Norte y Corea del Sur, doy fe de que la experiencia de vivir en este país, ha sido una de buenas y gratas experiencias.La Península del Sur de Corea cuenta con una población de cerca de 50 millones de habitantes, de los cuales 11 millones residen en Seúl, su capital. En comparación con Puerto Rico, la capital, únicamente, es exactamente la mitad de nuestra Isla. Es una gran ciudad comparable a Nueva York. A pesar de ser vanguardista, industrial, y estar en continuo y constante crecimiento, es una ciudad que guarda un gran respeto por su cultura y por sus valores.Vivir aquí me ha enriquecido. De otra parte, he encontrado similitudes con nuestras tradiciones, en su folclor, en la unión familiar como valor fundamental y en la comida. Veo mucha similitud en el gusto gastronómico, al punto que he comido aquí morcillas, pernil con su “cuerito”, arroz, habichuelas y sopones o asopaos.Preparan estas comidas, pero con diferente o ningún sazón. A lo que nosotros le ponemos sofrito, o adobo, ellos le agregan pique. La comida típica más conocida y que mejor representa a Corea, es el “kimchi”, repollo fermentado en una pasta de ají picante. Se come como acompañante, pero también se utiliza como condimento esencial en varios otros platos.Otra impresión que me ha impactado es su concepto de la eficiencia. El empeño, o intención, por aportar y convertir la ciudad en una “eco friendly”, se manifiesta aquí de muchas maneras. Seúl ha logrado construir uno de los más eficientes -si no, el más- sistema de transportación pública que he utilizado hasta el momento. Igualmente recomiendo no se conduzca un auto aquí si no conoce el sistema. Además de ser completamente innecesario, las leyes de tránsito y la manera de conducir es completamente diferente. A mi juicio, ¡guían horrible!Seúl es una ciudad muy grande, dividida por el Río Han. En la mitad norte -la ciudad vieja- puedes encontrar grandiosos palacios como el “Gyengbok Palace”, asimismo templos y la gran mayoría de las estructuras antiguas y oficinas gubernamentales. En esta área también se encuentran los mercados tradicionales como el “Insadong, Dongdaemun, Nandaemun, Myeongdong”; y lo que muchos consideran la atracción principal, la Torre de observación de Namsan o la “Torre de Seúl”, localizada en la cima de la Montaña de Namsan, por lo que desde aquí puedes obtener un panorama general de esta fascinante ciudad.Por otro lado, al sur, está la ciudad nueva. Aquí están las áreas más “trendy” de entretenimiento y moda, como Rodeo Street, Garosugil, Galleria Shopping Center, Coex Mall, donde están el acuario y el museo del Kimchi. También puedes encontrar modernos edificios corporativos y restaurantes con comidas internacionales en áreas como Apgujeong, Gangnam.Una ciudad seguraSeúl es una de las ciudades más seguras y limpias en las que he estado. Aquí el reciclaje es obligatorio y la policía no está armada. Es extremadamente amigable para familias, porque mantiene múltiples parques, zoológicos, acuarios, muchos de estos de entrada a muy bajo o ningún costo. También hay varios parques temáticos al estilo Disney, siendo los más conocidos “Lotte World” y “Everland”.De otra parte, posee una vibrante vida nocturna ya que la ciudad nunca duerme. El karaoke, conciertos y la creciente cultura “K-Pop” forman parte del entretenimiento nocturno.Los coreanos en general son personas muy amigables, pero no de inmediato. Tal vez las experiencias vividas en el pasado les hayan impactado el instinto de guardarse y protegerse. Siento que siempre están a la defensiva.La intensidad con la que han tenido que trabajar, por los pasados 50 años, para reconstruir las ruinas que dejó la guerra los ha convertido en máquinas que nunca se detienen. Siempre están buscando lo nuevo y lo moderno. Son extremadamente serviciales y limpios. Pongo como ejemplo, una imagen que me tocó. Vi en el “subway” una mujer que limpia el piso de la estación con paño en mano y de rodillas. Se afanan.Así como a nosotros se nos hace difícil distinguir la fisonomía de las nacionalidades asiáticos, así ellos perciben a los extranjeros como iguales. Nos llaman “Miguk”, palabra coreana que alude a “América”. No conocen mucho de nuestra Isla y como único logro hacerlos entender de dónde vengo es mencionando a Ricky Martin. Enseguida mueven las caderas y me cantan “La vida loca”.
Vivir fuera de mi Isla, alejada de las personas a las que amo, es inmensamente difícil. Sin embargo, aprecio sobremanera esta oportunidad que me ha dado la vida de crecer y conocer sobre esta cultura. Nada me llena mayor alegría que poder compartir estas experiencias con los lectores de De Viaje. Como dijo San Agustín de Hipona: “Para ir a donde no se sabe, hay que ir por donde no se sabe”. Puedes conocer más mis experiencias en Corea si accedes mi blog http://koyorrican.blogspot.com/
Recomendaciones:
• Para llegar a Seúl, desde San Juan, la mejor ruta es: Puerto Rico/Nueva York/Corea del Sur. El viaje toma aproximadamente 19 horas vuelo, sin incluir las conexiones. Serían 4 horas de Puerto Rico a Nueva York, y 15 horas directo de Nueva York a Corea.
• Korean Air es la mejor aerolínea a tales efectos. Para un vuelo de tantas horas, es preferible escoger la mejor, ya que el espacio entre los asientos y la calidad de servicio es esencial.
• Las compañías de turismo locales son muy eficientes. El servicio es de primer orden y sus ofertas tienen muy buenos precios. Créanme, son oficinas muy útiles para vencer la barrera del idioma.
• Consigue una guía o libro de frases comunes, o necesarias. Te puede ayudar.
• Todos los negocios o establecimientos abren aquí después de las 10:00 a.m.
• Si vienes, no dejes de visitar la Isla de Jeju en el sur de Corea. Es toda una experiencia.
• Bibimbap, kimbap, bulgogi, kalbi, dakgalbi, kimchi, kimchi Jigae, sundubu Jigae, sundae, son algunas comidas recomendadas.
• En general, los coreanos son muy limpios y se puede comer en la mayoría de los lugares sin problema alguno.
• No se acostumbra a dar propina.
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• Más info. http://english.visitkorea.or.kr/enu/index.kto
Hola soy Puertorriqueña al igual que tu. Excelente historia!!!
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